Siempre podría ser peor... (Post interruptus)

"Pocas veces pensamos en lo que tenemos; pero siempre en lo que nos falta".
Arthur Schopenhauer

Hace un par de semanas, veía en un noticiario -mmmm... bueno, en Hechos- una nota acerca de un suicida. El tipo en cuestión deseaba quitarse la vida por problemas económicos con el banco. Total, el suicida terminó aventándose de un puente quedando cuadrapléjico y ocasionando a su familia aún más gastos y con la deuda por pagar.

En estas ultimas semanas -desde mi viaje a PV- he andado en plan azote. Sí, quizá se deba a que ya viene el veranito y no podré salir de vacaciones. O en la sobre carga de trabajo a la que me he visto sometido. O a que no he podido cumplir mi propósito de priemer trimestre del año de tener el abdomen bien definido.

Apenas me entreré que innombrable ya andaba con alguien y me sentí aún más mierda de lo que habitualmente me siento. Y es que a decir verdad eso ya lo sabía -lo del nuevo galán de inno-. Lo que no entiendo es ¿Por qué si innombrable ya había dejado de ser innombrable* vuelve a "pegarme" saber que anda con alguien?

En momentos como estos, siempre recuerdo la canción de Morrissey, que me hace pensar que mi vida no está del todo mal, o que al menos podría ser mucho peor.

"I was driving my car
I crashed and broke my spine
So yes, there are things worse in life than
Never being someone's sweetie".

En breve seré un treintón, ¿Será que la crisis de los 30 se avecina incontenidamente? ¿Será que uno nomás siempre está en eterna insatisfacción y ese es el estado perenne del ser humano? -Schopenhauer, ¿Dónde estás?-.

Bueno, cuando niño yo, -algunos ayeres hace ya- no me imaginaba en esta situación, me imaginaba como un padre de familia, con portafolios, secretaria y camioneta -bueno, la camioneta ya la tengo, nomás me hacen falta los niños y el perro-. En la adolescencia me imaginaba como un road traveller -free as the grass grows, free as the wind blows-. Y en mi tempranísima juventud deje de pensar en el futuro -gracias Radiohead y Nietszche!!!-

Total, creo que mejor he de dejar de pensar en pendejadas y ponerme a chambear, que tengo que hacer una validación de soportes gráficos para el portal. Arrrrrrrrggggggghhhhh...

Odio cuando esto sucede.

Total a este wey sí que le va mal

Post sin sentido (para distraerme un poco en la oficina y llenar esta madre)

Los posts que no se planean suelen ser los mejores. Eso quiero creer ahora que no se me ocurre absolutamente nada que escribir... No puedo subir fotos porque mi compu no tiene bluetooth y no traigo los cables de la Blackberry.

No puedo subir videos porque no tengo acceso a Youtube.

No puedo hablar por teléfono porque no tengo recepción... Ni extensión -mi oficina es nueva-.

Es decir... Vivo en la edad de piedra!!!

Mi vida apesta... Pero podría ser peor

Bueno, la semana pasada estuve en Cholula de martes a viernes. Volví temprano con la intención de ir por unos drinks a donde fuera y con quien fuera. Total, que recibo una llamada de mi jefa diciéndome que por ordenes del jefe-de-jefes, había que venir a chambear hoy sábado... Y al parecer mañana será lo mismo. Mieeeeeeeeeeeeerda!!!

Eso no es lo peor, resulta ser que no he terminado el trabajo del curso de Guía de Práctica Clínica que debí haber entregado hace una semana. Y ahora tengo que diseñar un cuestionario y una evaluación de la misma. Ooooooooooottttttttttssssssssss...

Hay una epidemia de gripe aviar que según javier alatorre -así, con minúsculas- acabará con media Ciudad de México. Ese no es el pedo. Lo culero es que mientras se mueren 10 millones de chilangos, todo va a estar cerrado. Chaaaaaaaaaale.

De por qué no posteo...

Bueno, por fin he recordado mi clave de acceso al blogger. La verdad es que con tanto trabajo se me ha hecho un poco difícil postear. No es que no tenga que contar, por el contrario, han sucedido demasiadas cosas en este impasse blogueril que me desconciertan un poco.

De entrada, creo que mi manejo del tiempo no está siendo adecuado. Hace una semana -¡Una semana!- estaba yo tumbado en la arena en Puerto Vallarta, desde luego, con la resaca correspondiente.

Tengo casi 30 y aunque no me siento, ni me veo, ni estoy viejo -y aquí no me dejo llevar por lo que dice la OMS que considera jóvenes a los que tienen hasta 25-, no sé si esté en el camino correcto. Es decir, hace muuuuuuuchos años, lo único que deseaba era vivir al día, viajar por el mundo y conocer gente distinta.

Ya sé que todos en algún momento hemos deseado vivir así, aunque eso implique decir adiós a las TdC -menos a la del banco gringow que tan feliz me hace en los duty free-, a las comodidades -nada de room service, agua calientita y acceso al féisbuc-, y a la familia -mmmm... pasar una temporadita away from them siempre es bueno-.

Esto lo podría lograr si fuera actor, fotografo -free lance, of course- escritor o rock star. Pero pues apenas estoy conviertiéndome en oficinator -café del Oxxo incluído-. Hay veces que me gustaría dejar mi "cueva" y largarme a la India, o a Tailandia, o a la isla de Borneo... O de menos a la Sierra norte de Chihuahua y vivir con los rarámuris. Es decir, quiero y no puedo.

¿Por qué?

Ya desde antes de Humberto Eco se planteaba la idea de una "vuelta a la edad media", es decir al oscurantismo total; a la época de la riqueza en apenas unos y la esclavitud en los muchísimos otros; a la vuelta de los movimientos extremistas y radicales, a las guerras "santas", y demás. Sounds familiar?

Ahora son las grandes corporaciones los nuevos señores feudales, el imperio de lo efímero -Lipovetski dixit- nos ha conquistado. Los valores actuales se relacionan más con el parecer que con el ser. De verdad, me parece lamentable.

O.K. No es que me encuntre organizando una guerrilla civil en contra del sistema, para eso está el sub -así, con minúsculas- que ya hasta aparece en portadas de revistas de socilités.

Y es que reconozco que pagar mes a mes la cuenta de los restaurantes, tintorerías, librerías, boutiques -aunque juré no comprar nada este año*-, TdC, cines, y demás cosas que hacen la vida agradable no me encanta en lo absoluto, también es cierto que no me atrevo a vivir una vida free as the grass grows, free as the wind blows.

Pero bueno, no importa, ahora voy a seguir chingándole -que ya no sé a qué venía todo esto- hasta pagar mis deudas, después, ya veré.

Eso sí, de ahora en adelante, noticias mías más frecuentemente.

Epílogo: Los posts que aún me faltan por subir

-Instrucciones para llorar
-De aguamalas y otros bichos
-Como ponerse mamey
-Y varios más...